Historia
El año 2018 mientras, vivía en Estados Unidos, me formulé una pregunta: ¿será factible cambiar el mundo tomando café? Fue así como empecé a trabajar en el proyecto Café Solidario con la idea de ejecutarlo lo antes posible.
Al regresar a Chile un año más tarde, y mientras trabajaba en mi cafetería, me propuse avanzar todos los días un poco hasta que el escenario nacional me obligó a acelerar ese proceso. El estallido social ya había tenido un impacto en las ventas de mi negocio y posteriormente la pandemia tuvo efectos irreversibles tanto para mí como para muchas Pymes. Fue entonces cuando tomé la decisión ya de forma más concreta y volqué toda mi energía en poner a disposición de las fundaciones y organizaciones de bien social un producto de consumo masivo de excelencia. Un producto diferente que nos diera a todos la oportunidad de poder ayudar a otros a través de nuestra plataforma cafesolidario.cl y así llegar a todo Chile con el calor, la calidad y la energía de un café que fue creado para beneficiar a miles de personas.
Poco a poco, y después de mucho esfuerzo es que hemos logrado hacernos un nombre. Nuestros horizontes son más amplios pues la idea no es sólo vender un café 100 % arábico, de buena calidad y ayudar. Nuestra meta es lograr impacto social real y concreto.
Para este año, a pesar de la pandemia, nos hemos planteado desafíos en grande. Creemos que sí es posible cambiar el mundo tomando café.
De hecho, entre nuestras alianzas más recientes se encuentra la campaña creada junto a Techo para Chile y Fundación Vivienda. Esta última tiene por objetivo entregar 10 viviendas de emergencia, para 40 familias en nuestro país, gracias a las ventas de packs solidarios y las líneas de café adheridas. ¡Hoy los invitamos con mucho orgullo a ser parte del cambio!